La Reina Isabel II. Foto: EFE
Este 8 de septiembre el Palacio de Buckingham confirmó lo que por varias horas se había estado teorizando: la reina Isabel II murió a los 96 años luego de estar desde 1952 en el trono (70 años reinando).
La reina había roto hace pocos meses el récord histórico de la monarca en ejercicio más longeva en la historia del Reino Unido. Su reinado sólo ha sido superado históricamente por el rey de Francia Luis XIV que permaneció en el trono durante 72 años (1643 – 1715).
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La mala hora se veía venir. La reina había reducido hace unos meses su agenda por agotamiento y no se había visto en público en las últimas semanas hasta que recibió hace unas horas a Liz Truss para oficializar su nombramiento como primera ministra de Reino Unido.
Durante la mañana del 8 de septiembre, el Palacio de Buckingham emitió un comunicado confirmando lo que muchos sospechaban: la salud de la reina no era la mejor.
«Luego de una evaluación adicional esta mañana, los médicos de la Reina están preocupados por la salud de Su Majestad y han recomendado que permanezca bajo supervisión médica. La Reina sigue cómoda y en Balmoral», decía el comunicado.
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Seguido de este comunicado, la familia de la reina Isabel II se reunió en Balmoral y horas más tarde, el Palacio de Buckingham confirmó la muerte de la monarca.
«La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde. El Rey y la Reina Consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana», dice el comunicado.
La reina Isabel II se casó el 20 de noviembre de 1947 con el príncipe Felipe, duque de Edimburgo, en plena recuperación del mundo tras la Segunda Guerra Mundial. Ellos estuvieron casados por más de 74 años.
De dicho matrimonio nacieron cuatro hijos: Carlos (heredero del trono), Ana, Andrés y Eduardo. Ellos a su vez le dieron ocho nietos y doce bisnietos.
Durante las siete décadas que la reina Isabel II estuvo en el trono, vivió grandes acontecimientos de la historia reciente de la humanidad. Por ejemplo, su reinado inició cuando el mundo estaba enfrentado las dificultades de la posguerra.
También vivió hechos históricos como la Guerra de Corea, la llegada del hombre a la Luna, la Guerra de Vietnam y la Guerra de las Malvinas; la tensión de la Guerra Fría, la Revolución Cubana, la caída de la Unión Soviética, la caída del Muro de Berlín, las Guerras en Irak y Afganistán; los atentados del 11S, la crisis económica del 2008, la Primavera Árabe, el Brexit, la pandemia de la Covid-19 y el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Sin duda, el evento histórico más importante en el que ella tuvo participación fue la Guerra de la Malvinas, un conflicto entre Reino Unido y Argentina en 1982. La victoria inglesa impulsó en gran medida la caída de la dictadura militar argentina; no obstante, siempre se ha discutido la fuerza desmedida con la que Reino Unido atacó a los jóvenes argentinos que fueron obligados a ir a la guerra.
Una joven princesa Isabel se encontraba de paseo en medio de la densa selva de Kenia cuando su padre, el rey Jorge VI, falleció. Esta joven de 25 años se convirtió en reina de la noche a la mañana pero ella solo lo supo unas horas después mientras pudo ser localizada para darle esta lamentable noticia.
La reina Isabel II estaba en Kenia como representación de su padre enfermo. En ese momento Kenia era una colonia británica.
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Para aquel entonces la princesa ya estaba casada con el príncipe Felipe, quien la acompañó a este viaje sin pensar que tendría que darle esta noticia a su esposa, la cual de facto la convertiría en reina curiosamente en el hotel en el que se hospedaban.
Desde entonces, Isabel II ha tenido que liderar la monarquía británica pero su coronación oficial solo se dio hasta el 2 de junio de 1953 en la abadía de Westminster.
Ciertamente, el reinado de Isabel transcurrió de forma convencional hasta la década de los 90 cuando comenzaron a suceder crisis familiares una detrás de la otra.
Sin duda uno de los hechos familiares que más golpeó a la familia real fue la separación de su hijo mayor el príncipe Carlos de Gales y la princesa Diana, quien fallecería en 1997 en un accidente de tránsito en París.
De hecho, la década de los 90′ fue muy difícil para la reina e incluso llegó a calificar 1992 como “Annus Horribilis” (año terrible) debido a la separación de sus hijos Ana y Andrés. Además, del grave incendio que se registró en el castillo de Windsor dejando considerables daños.
En 2020 su nieto Harry renunció a sus títulos reales y se apartó de sus funciones con la corona. Así mismo él y su esposa renunciaron a recibir financiamiento público y se mudaron a Estados Unidos.
Su hijo el príncipe Andrés, duque de York, fue acusado de abusar en tres ocasiones de Virginia Giuffre cuando ella tenía 17 años.
Finalmente, en 2021 el esposo de la reina, Felipe de Edimburgo, falleció el 9 de abril, luego de 74 años de matrimonio.
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