La muerte de Sofía Morales, una adolescente mexicana de 17 años, ha generado una enorme ola de indignación entre las mujeres jóvenes del país. Sofía, alumna de preparatoria de la UNAM, falleció el pasado 8 de abril tras ingerir una bebida adulterada en su fiesta de graduación. Otra de sus amigas también resultó intoxicada en el mismo lugar y estuvo hasta el martes ingresada en el hospital. La Fiscalía investiga el deceso de Sofía bajo el protocolo de feminicidio.
Morales era alumna de la Preparatoria 4 Vidal Castañeda y Najera de la UNAM. Amante del mundo artístico y con buenas notas, quería estudiar Artes en la Universidad.
El pasado viernes tuvo su fiesta de graduación. Tocaba celebrar el fin de las clases. La cita era en el bar Marvelous, ubicado en la colonia Doctores, en el centro de Ciudad de México. En un momento de la noche, Morales y una de sus amigas cayeron desmayadas. Pocos minutos antes habían tomado una bebida que alguien les había ofrecido.
Dos compañeras llamaron a la ambulancia y las acompañaron hasta el hospital más cercano. Morales llegó al centro médico sin signos vitales. La otra adolescente, cuya identidad no ha sido revelada, ingresó en estado de gravedad. Recibió el alta el martes al encontrarse ya fuera de peligro.
El pasado sábado el cuerpo de Sofía fue trasladado al Instituto de Ciencias Forenses para llevar a cabo la autopsia y con ello conocer las causas de la muerte.
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En la mañana de ayer, familia y amigos de la joven Sofía Morales se congregaron en el Ángel de la Independencia para dar inicio a una marcha hacia el Zócalo para exigir justicia por el feminicidio de la adolescente. Al contingente se unieron colectivas feministas y alumnas de la universidad. Las manifestantes han repartido las ilustraciones de mujeres luchando que hacía Sofía por la avenida más emblemática de la capital.
“Nada me va a regresar a mi hermana, ni a mi papá su hija, pero esto es lo que ella hubiera querido”, dice Jorge Morales en declaraciones a El País sobre la protesta que se ha organizado en respuesta a la muerte de su hermana. “Sofi siempre fue muy activista, feminista. Tenía miedo de que no se oyera su voz y ahora está gritando más que nunca”.
Entre las jóvenes presentes en la manifestación, un mensaje se repetía: “Ya no podemos sentirnos seguras en ningún lugar”.
Hace tres semanas, otra estudiante de 15 años fue presuntamente intoxicada y sufrió abusos sexuales en la escuela preparatoria del Instituto Politécnico Nacional.
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Protesta organizada en Ciudad de México al grito de “Ya no podemos sentirnos seguras en ningún lugar”. Foto: EFE
Según informan algunos medios locales, la FGJ ha identificado a la mujer que presuntamente le dio la bebida adulterada a Sofía Morales. La presunta responsable de la intoxicación sería una de sus compañeras.
Con base en los exámenes practicados, las autoridades han determinado que la bebida que se le ofreció a la estudiante fue mezclada con un medicamento oftálmico. Aparentemente, el exceso de ese producto le pudo causar la muerte.
Según cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en México ocurren un promedio de 11 feminicidios diarios. Con 3462 casos reportados, según el SESNSP, 2021 fue el año con más feminicidios desde que se empezaron los registros.
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