Los secretos detrás de cámaras de la famosa película Mad Max: Fury Road pronto serán revelados.
La película Mad Max: Fury Road, del cineasta australiano George Miller, fue una de las más premiadas y taquilleras de 2015.
Y aunque cautivó a audiencia y críticos por igual, tiene muchos secretos detrás de escena que están a punto de ser contados.
Entre ellos está la mala relación que había entre sus protagonistas, Charlize Theron y Tom Hardy, y que será detallada en el nuevo libro de Kyle Buchanan, Blood, Sweat, and Chrome: The Wild and True Story of Mad Max: Fury Road.
“No quiero poner excusas para el mal comportamiento, pero fue una filmación difícil”, dice Charlize Theron a Buchanan en un fragmento de este libro, publicado por Vanity Fair.
“No querían tocarse, no querían mirarse, no se vieron cara a cara a menos que la cámara los filmara activamente”, dijo J. Houston Yang, editor de la película.
El momento más tenso ocurrió cuando Tom Hardy llegó tres horas tarde a la filmación.
El operador de cámara, Mark Goellnicht, señaló que Charlize Theron gritó que multaran con cien mil dólares a Hardy por cada minuto que le quitara al equipo.
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Goellnicht dijo: “Es posible que él haya escuchado algo de eso, y fue contra ella y le gritó: ‘¿Qué me dijiste?’ Era bastante agresivo”.
Fue en ese momento cuando Theron solicitó a los productores protección especial porque no se sentía segura.
El libro de Buchanan, que está a la venta a partir del 22 de febrero de 2022, también cuenta con los testimonios de otros actores de la película e integrantes del crew, entre ellos Nicholas Hoult.
Hoult hizo una analogía de su experiencia filmando Mad Max con un auto «en tus vacaciones de verano con los adultos en la parte delantera discutiendo».
Charlize Theron estuvo de acuerdo con esta comparación.
“¡Fue horrible! No deberíamos haber hecho eso; deberíamos haber sido mejores. Puedo reconocer eso”, dijo la intérprete de Imperator Furiosa.
Tanto Theron como Hardy reconocieron que pudieron haber sido mejores compañeros durante el rodaje de la película.
“La presión sobre nosotros dos era abrumadora a veces. Lo que ella necesitaba era un mejor compañero, quizás más experimentado. Eso es algo que no se puede fingir. Me gustaría pensar que ahora que soy más maduro y más feo, podría estar a la altura de esa ocasión”, dijo Hardy.
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