Playground - Varias trabajadoras denuncian discriminación machista PlayStation - EFE
En total ocho mujeres han han tomado la iniciativa de acusar a varias divisiones de Sony Interactive Entertainment en Estados Unidos por recibir un trato sexista. Emma Majo, una ex empleada de la empresa, decidió denunciar a la PlayStation en noviembre tras sufrir discriminación de género y un despido injustificado. Ahora, ocho mujeres más se han sumado a la demanda. Declaran que había un «ambiente tóxico» y «machista» en las oficinas en las que trabajaban.
Majo, analista informática, decidió llevar a los tribunales a la empresa después de que la despidieran sin justificación. Aseguró que su jefe no le contestaba por el hecho de ser mujer y que no podía optar a aumentos de sueldo y promociones para mejorar las condiciones de trabajo. Eso, según la protagonista de la historia, era claramente a causa de vivir en «una cultura laboral dominada por hombres».
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Ante el juez añadió que muchas trabajadoras de la compañía habían pasado por situaciones similares a las que ella describía. Al tiempo, les hacía una solicitud: añadir todas las quejas a la misma demanda para demostrar que lo que contaba era verdad. Nada más y nada menos que ocho trabajadoras se sumaron a sus declaraciones presentándose ante el tribunal. Una especie de #MeToo acababa de empezar en PlayStation.
Marie Harrington, una de las mujeres que declaró, estuvo trabajando durante 16 años en la compañía. Explicó que las mujeres no eran consideradas a optar a un puesto directivo tanto como los hombres. Kara Johnson, otra de las empleadas que se sumó a la queja, añadió que en PlayStation se respira un «ambiente tóxico«. Alguna de las conductas discriminatorias que mencionó en su declaración fue el trato discriminatorio a las embarazadas por parte de la compañía.
Aunque en febrero anunciaron que la denuncia de Majo no había sido suficiente para demostrar la supuesta discriminación sexista, con estas nuevas pruebas el juez ha decidido revaluar el caso en la audiencia que está prevista en abril. Entiende que no se trata de una cuestión personal, sino colectiva.
En el sector de los desarrolladores y creadores de videojuegos ha habido señalamientos similares al que denuncia Emma Majo en empresas como Ubisoft, Activision o Riot Games. Bobby Kotick, consejero delegado de Activision Blizzard, está enfrentándose a una investigación por señalamientos de acoso y discriminación laboral. Y no solo eso, Ubisoft también lleva años luchando contra juicios por maltrato y acoso en las oficinas de Singapur, Canadá y Francia.
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